jueves, enero 30, 2014

Gandhi – Su vida era el mensaje


Hoy 30 de enero es el 66 aniversario de la muerte de Mohandas Karamchand Gandhi, más conocido por Mahatma Gandhi. El nombre honorífico Mahatma, que significa “alma grande”, se lo dio el gran poeta y filósofo indio Tagore. Procedía de una familia sencilla que vivía en una pequeña ciudad, Porbandar, a la costa en el oeste de la India.



Por la ocasión he desempolvado un libro en mi biblioteca, de tan solo 63 páginas, pero con una densidad de contenido mayor que muchas biografías que ocupan diez veces más páginas. Su título es el mismo que el de este post, pero en inglés: “Gandhi – His Life was the Message” (*). Lo escribió Donn Byrne, un escritor poco conocido  que murió en septiembre de 2011, y que más que escritor era un profesor o maestro (escribió manuales para maestros y profesores), dicen que brillante, que enseñaba inglés oral en una variedad de países de Europa, América, África y Asia, y en particular en la India.

En la contraportada del libro se lee: “Su familia era gente sencilla. Pero cuando Gandhi murió en 1948, se había convertido en ‘el padre de la nación’ y la población de India y de todo el mundo se entristeció.
El libro contesta a las preguntas “¿Cómo llegó Gandhi a ser tan famoso? ¿Qué poder especial tenía? ¿Era un santo o un político?” Y cuenta “la historia de un hombre cuyas ideas siguen siendo valoradas y discutidas en todas partes hoy mismo.” Y tanto. Por ejemplo, la Asociación “Gesto por la Paz” organizó cada año en el aniversario de la muerte de Gandhi una gran manifestación silenciosa en Bilbao contra el terrorismo de ETA. Hasta que recientemente se disolvió la asociación después de que ETA decidió dejar “la lucha armada”.
El libro empieza con el final, “El último día de Gandhi”. Al mediodía Gandhi había tomado un lunch ligero de vegetales, algo de fruta y algo de leche y después había hecho una siesta. El capítulo cuenta lo que pasó después, como si estuviésemos allí, con Gandhi. Era en camino hacía una reunión de oración, acompañado por sus nietas que le ayudaban a andar. Había una muchedumbre aclamándole en la calle, pero el escenario cambió de golpe. “De pronto un hombre joven salió de la muchedumbre, unió ambas manos para saludar según la costumbre india. Gandhi le sonrió cuando le vio. Entonces el joven sacó una pistola de debajo de su vestimento. Apuntaba le pistola a Gandhi y disparaba tres veces. Estaba muy cerca de Gandhi y le alcanzó cada vez. ‘¡He Rama!’ gritó Gandhi. ‘¡O Dios!’ Gandhi cayó al suelo. Unos minutos más tarde había muerto.” Así termina el capítulo.
El siguiente capítulo habla del ejemplo de su madre, Putlibai, creyente convencida de la religión hindú. Gandhi mismo había escrito un libro sobre ella y contaba que un año en la época del monzón, una fuerte borrasca que se desplaza cada año sobre la tierra acompañada de fuertes lluvias, a veces demasiadas, causando la inundación de los campos. Putlibai dijo a su numerosa familia que los días que no brillaba el sol, no comería y que antes de tomar cualquier alimento quería ver el sol.
El tercer capítulo cuenta la juventud de Gandhi. En realidad Gandhi tuvo una niñez muy corta, ya que se casó a los trece años con una mujer llamada Kasturba, también niña. Era la costumbre en la India. Aunque a Gandhi le gustó inicialmente, más tarde creyó que era una mala costumbre.
En siguientes capítulos se cuenta la estancia de Gandhi en Londres, desde septiembre de 1888, para estudiar derecho (no gustó a su madre que fuese a Inglaterra); su retorno a la India en 1891; su viaje y estancia en Suráfrica durante 21 años para ayudar y defender a los indios que eran tratados de forma igual que los negros; su vuelta la India en 1915; su desencuentro con los británicos después de que hombres indios habían estado combatiendo juntos con ellos en la Iª Guerra Mundial 1914-1918 sin ningún reconocimiento, por lo que Gandhi empezó su lucha pacífica contra la ocupación de su país por Gran Bretaña, incluyendo el boicot de importaciones inglesas, p.ej. la sal. Etc.
En 1939 se desencadeno la 2ª Guerra Mundial y de nuevo Gran Bretaña requería la ayuda de los indios, pero fue el inicio decisivo de la lucha de los indios contra los británicos.
La lucha pacífica de Gandhi consistía en huelgas de hambre y en promover la desobediencia civil, lo cual le ha costado en total más de 6 años de prisión, en varias ocasiones, en la India y en Suráfrica. Su razonamiento era siempre el mismo: que si los indios siguieran sus directrices, no cabrían todos en las prisiones. A medida que los días en prisión aumentaban y que la salud de Gandhi empeoraba, la resistencia de los indios aumentaba, hasta que las autoridades temían lo peor: la reacción de los indios si Gandhi muriese en la prisión. En 1944 Gandhi se puso tan enfermo en prisión que lo liberaron, y después nunca más ha vuelto a ser preso.
Al final de la Guerra Mundial, en 1945, Inglaterra ofreció por fin la independencia a la India, pero las luchas sangrientas internas entre hindús y musulmanes dejaron el país dividido, lo cual dolía mucho a Gandhi que quería que viviesen pacíficamente juntos.
El 15 de Agosto de 1947 la India obtuvo por fin la independencia pero quedó dividida en dos países: La India donde viven los hindúes y el Paquistán donde viven los musulmanes. Cientos de miles de personas habían muerto y millones de personas habían tenido que trasladarse a otro país por motivos de la religión.
Gandhi sabía que algunos hindúes le odiaban y querían matarle por haber ayudado también a los musulmanes, pero él no quería protección policial. “¡Que me maten!” dijo. “Quizás mi muerte les enseñará algo…”
Donn Byrne termina su libro diciendo que Gandhi usaba las armas de un santo: el ayuno y la no violencia, y concluye “¡Quizás pues Gandhi era un político que intentaba ser un santo… o un santo que quería ser un político!”
Cuenta el autor que algún hombre famoso (no da su nombre) pedía a Gandhi un mensaje especial. “No tengo nada especial que decirle”, le contestó Gandhi, “pero puede estudiar mi vida… Mi vida es mi mensaje”. 

(*) Editado  por Longman Group Limited por primera vez en 1983 y con muchas reimpresiones en años posteriores. Se sigue vendiendo en muchas librerías online. La edición que tengo es la cuarta, de 1986. La foto de Gandhi en la cubierta es de Popperfoto.

domingo, enero 19, 2014

Los mayores riesgos para el mundo


El Informe Global Risks 2014 (*) del Foro Económico Mundial, presentado el pasado16 de enero 2014, analiza con una perspectiva de diez años, 31 riesgos mundiales de naturaleza mundial que podrían causar impactos negativos importantes en las industrias y los países, si se concretan. Los riesgos se agrupan en cinco categorías – económica, medioambiental, geopolítica, social y tecnológica – y se miden tanto en términos de sus probabilidades de concreción, como en su impacto potencial.

El informe llega a la conclusión que la disparidad de los ingresos, en concreto la brecha crónica entre los ingresos de los ciudadanos más ricos y los más pobres, es el riesgo que más probablemente podría causar graves perjuicios a escala mundial en la próxima década. Otros de máxima importancia son episodios meteorológicos extremos, el desempleo (en particular el juvenil) y las crisis fiscales.

Los 5 riesgos considerados los más probables son, en este orden:

1.    La disparidad de ingresos (riesgo social)

2.    Episodios meteorológicos extremos (riesgo medioambiental)

3.    El desempleo y subempleo (riesgo económico)

4.    El cambio climático (riesgo medioambiental)

5.    Los staques cibernéticos (riesgo tecnológico)

Los 5 riesgos considerados de mayor impacto potencial son:

1.    Crisis fiscales (riesgo económico)

2.    Cambio climático (riesgo medioambiental)

3.    Crisis del agua (riesgo medioambiental)

4.    Desempleo y subempleo (riesgo económico)

5.    Interrupción crítica de la infraestructura de la información (riesgo tecnológico)

Jennifer Blanke, Economista Jefa del Foro Económico Mundial, advierte que la interconectividad de los riesgos hace que sus repercusiones negativas sean más pronunciadas ya que, en su conjunto, pueden ejercer un efecto aumentado.

El informe considera, en particular, los dos desafíos altamente asociados a los que hacen frente los jóvenes que llegan a la mayoría de edad en la actual década de menores oportunidades de empleo y costos crecientes de la educación, y evalúa su impacto sobre la estabilidad política y social así como el desarrollo económico. Ante el hecho de que más del 50% de los jóvenes de algunos países desarrollados estén buscando trabajo y de que hay un nivel creciente del empleo informal en regiones en desarrollo donde vive más del 90% de la juventud del mundo actual; el Informe brinda perspectivas de cómo pueden desplegarse medidas tecnológicas y de otra índole a fin de mitigar una parte de este riesgo.



David Cole, Jefe de Riesgos del Grupo, de Swiss Re, manifestó: “Hoy en día muchos jóvenes se enfrentan a una situación muy difícil. Como resultado de la crisis financiera y la globalización, la generación más joven de los mercados maduros lucha contra una situación desesperada, con cada vez menos oportunidades de trabajo, y con la necesidad de soportar el envejecimiento de la población. Aunque en los mercados emergentes hay más trabajo, los trabajadores aún no poseen el amplio conjunto de aptitudes necesarias para satisfacer la demanda. Es vital que nos sentemos con los jóvenes ahora y empecemos a plantear soluciones que tengan como objetivo crear sistemas educativos más adecuados, mercados de trabajo funcionales, intercambios eficaces de competencias y el futuro sostenible del que todos dependemos”.

(*) El Informe Global Risk 2014 ha sido desarrollado con contribuciones de expertos de las cpmañías Marsh & McLennan, Swiss Re, el Grupo de Seguros Zurich, la Oxford Martin School (Universidad de Oxford), la Universidad Nacional de Singapur, y el Centro Wharton de Gestión del Riesgo y de Procesos de Decisión (Universidad de Pennsylvania).

jueves, enero 16, 2014

Somos hombres globales, pero…

Somos hombres globales…. ¿Por qué?

En la calle,

Llevamos camisas Hugo Boss fabricadas en China.











Llevamos polos Ralph Laurent fabricados en Hong Kong.











Llevamos calzoncillos Hugo Boss fabricados en Egipto, el país de los faraones.









Llevamos zapatos Clarks fabricados en Vietnam.










Aunque hay que decir que llevamos pantalones Burberry made in Spain

En casa,

Llevamos pijamas Calvin Klein fabricados en Indonesia.











Llevamos batas Zara fabricadas en Turquía.








Cuando hacemos deporte,


Llevamos ropa Sergio Tacchini fabricada en Corea (y también en China).










Etc., etc., etc.


Somos hombres globales..., por el vestimento, aunque más bien asiáticos. Pero “el hábito no hace el monje”. Y solo los que se pueden permitir comprar ropa “de marca”. El 25 % de “la población activa” quizás no puede. Está en el paro. ¿Deberán estos “activos potenciales” también globalizarse e ir a China, Hong Kong, Corea, Vietnam, Indonesia, Turquía o Egipto para convertirse en “activos de verdad”?, para vestirnos, pregunto.

lunes, enero 06, 2014

Un artículo por cada una de las 12 campanadas han visto los visitantes de este blog

Desde la Navidad,

pasando de un año a otro contando las campanadas,

hasta la llegada de los Reyes Magos


Sucesos inverosímiles
y un poco de historia real

Personas que mueren pero hacen historia

De  los orígenes del universo
al cambio climático

Un estadio que desaparece para construir otro
mientras los hay que piensan que la carretera es suya

El caso raro de una familia “numerosa” feliz,
y otra gente con “mucha cara”


¡Gracias por vuestro interés!
Ser, Saber, Sentir