El pasado miércoles, cuatro estudiantes, tres chicas y un chico, de 17 y 18 años, tenían que ir en bicicleta de Gante hasta el “muro” Geraardsbergen (la temida cuesta de pavés de la Vuelta Ciclista a Flandes), como examen de bautismo de novatos estudiantiles. Iban normalmente, por la pista reservada para ciclistas, con chaquetilla fluorescente y luces, porque era de noche. No llegaron a terminar la prueba. Otro jóven de 22 años que perdió el control de su coche los atropelló en el camino, en el pueblo de Oosterzele. Tres han muerto y el tercero se repone de sus heridas, lo que puede durar un mes. El chófer iba a 90 km/hora donde el límite era 70 km/hora y se salió de la curva. Tenía una tasa de alcohol más alta que la permitida, pero no iba ebrio (quizás eufórico y con exceso de confianza). Dicen que no bebió más que tres vasos de cerveza. Tuvo mala suerte, porque no ha sido el primero que circula así, sin pensar en las posibles consecuencias... La noticia estuvo varios días en los titulares de los medios en Bélgica.
Las consecuencias: tres vidas rotas, tres carreras cortadas desde el principio; el cuarto atropellado herido y con un trauma mental; el jóven chofer, que fue arrestado, ha quedado en libertad provisional con la prohibición, de momento, de conducir y de beber alcohol. Parece que también sufre un trauma mental. No se le borrará nunca de su mente. Una euforia con un alto precio. Una consecuencia negativa también para el gobierno que pretende animar el uso de la bicicleta para resolver los problemas ecológicos y de circulación. El objetivo era que el año que viene el 19% de todos los desplazamientos en Flandes se hagan por bicicleta...
Es que Bélgica es el tercer país ciclista de Europa en cuanto a kilómetors al año por habitante, unos 560, detrás de Dinamarca (890) y Holanda (850). El 90% del ciclismo belga se hace en Flandes. Pero de los tres Bélgica es el menos seguro, con el mayor número de accidentes de ciclismo por millón de habitantes. En gran parte por problemas de infraestructura ciclista: los cruces, las rotondas y las pistas ciclables de dos direcciones (que según el Gobierno son desaconsejables), que son los lugares con más accidentes. A pesar de que por mejoras en años pasados el número había disminuido, pero ahora se mantiene estable. Por el otro lado, como consecuencia del accidente, instituciones y organizaciones están pidiendo más exigencias en la formación de los conductores y la introducción del sistema de puntos de castigo en el permiso de conducir.
Que pueda este ejemplo servir para otros países y regiones...
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